Vetamadre es una de las bandas de culto argento que mejor se conserva en la actualidad. Mientras muchas de las contemporáneas a sus comienzos dejaron de existir, ellos parecieran afirmarse cada vez más en su trayectoria. No es que el reconocimiento les haya llegado tarde, porque Julio Breshnev conoció las mieles del éxito a temprana edad con su banda adolescente de new wave, Cosméticos. Mientras que a su vez, en su tercer disco contaron con la colaboración de Arnedo y Mollo (nada más y nada menos). Es decir, que siempre estuvieron bien plantados en la escena, pero en los albores de la MTV nacional, lo que reinaba era el Rock Chabón o su vertiente más rioplatense. Los discos conceptuales en los que se aventuraba Vetamadre no parecÃan ser la comidilla de la prensa especializada.
Pero como el tiempo pone las cosas en su lugar, hoy Vetamadre cuenta con el un absoluto reconocimiento entre sus pares, sus recitales son cada vez más multitudinarios y siguen conquistando corazones que huelen como espÃritu adolescente. ‘Coca’ Monte (bajista y productor) es hoy uno de los aliados fundamentales de Juana Molina – a quien amamos profundamente – y Julio Breshnev es una de esas voces que viene resonando en nuestras cabezas hace dos décadas, por su notable versatilidad. ArriesgarÃa decir que es una de las mejores del nuevo milenio, si de rock nacional hablamos. Por eso siempre es bueno tener la oportunidad de robarle unos minutos.
«Tengo la televisión / Alguien en la red y un celular / Pero ya no hay conexión / Soy como una isla«, cantás en ‘Veta Madre’ (el tema) y se me ocurre hacerte una pregunta que se la hicieron a otro artista que también tiene ese postura de alerta en cuanto al avance de la tecnologÃa en nuestras relaciones sociales. La pregunta es: ¿Qué se siente estar en lo correcto?
Ese tema es de una época en que muchas de las realidad que tenemos hoy no existÃan, asà que me parece medio premonitorio. Pero es como decÃa Sabato, que el futuro es una abstracción del pasado. Siempre todo es lo mismo pero cada vez más abstracto. Yo creo mucho en eso. No me gusta denominizar la tecnologÃa ni endiosarla. Voy tomando todo lo que la vida va proponiendo y buscándole la vuelta para que sea lo más armoniosamente posible. Aunque se sufre vivir en una ciudad de gente sin caras y con la tecnologÃa a tope. Es algo que lo sufrÃs y lo compartÃs. No sé si hay un lado correcto.
A quien se la hicieron fue a ThomYorke, por eso creÃa que también venÃa al caso hacértela a vos.
Wow.
Entiendo que esa postura es de alguna manera en la que te mete el rock, un estado de alegrÃa y frustración.
SÃ, totalmente. Ponés canciones tristes para sentirte mejor. Hay un lugar muy poético donde uno puede redescrubrir el mundo desde otro lugar y que haya sufrimiento en eso. Si hay sufrimiento en el amor, significa que en todos los planos va a ser de la misma manera. De todas maneras, a mà el Rock Panfletero no es el que más me engancha, pero en todos los aspectos del rock siento que tiene que estar implÃcita esa cosa de no dar el brazo a torcer antes de repreguntar. La rebeldÃa no es porque sÃ. El artista tiene que estar un poco en contra de lo que todos creen porque sino estamos fritos como especie.
Vetamadre logró lo que pocas bandas consiguen que es traspasar su generación y seguir llegándole a los nuevos adolescentes. ¿En qué creés que se basa eso? ¿En lo que se vive en los recitales, en las letras que como decÃas antes parecen seguir siendo actuales, en el sonido de la banda que no tiene muchas otras similares?
¡Uf. Qué pregunta! No tengo idea. A veces pienso como que Vetamadre trascendió. Los primeros discos son tan conceptuales en ese sentido. Yo siempre soñaba con que conectar con la gente que le gusta tu música sea una conexión de verdad. Yo veo eso mismo que ves vos, me veo reflejado en vos. Creo que el que escucha Vetamadre te lo cuenta de esa manera.
Con Cósméticos ustedes la pegaron con ‘Uh Na Na’, girando por el paÃs, sonando en las radios y decidiste bajarte de un caballo que todos quieren montar. ¿Con Vetamadre cuando empezaste a sentir que otra vez estaba sucediendo eso de «pegarla»?
Nunca lo habÃa pensado asÃ. Yo tenÃa un flash como de no pegarla, no querÃa que fuéramos una banda exitosa. Pero creo que hubo un momento. Un dÃa fuimos a un show en Claromecó e hicimos el show de siempre, cerramos con ‘Ruido del Mundo‘ y cuando terminó el tema la gente empezó a cantar el estribillo. A partir de ahà fue siempre que terminábamos con ese tema, la gente como que se quedaba con ganas de cantar el estribillo y lo empezaban a cantar. No sé si porque lo compusimos mal o qué, jaja. Pero ese fue un momento muy Ãntimo para nosotros.
En el último tiempo incluyeron un par de colaboraciones como las de «Corvata» Corvalán y la de Marilina Bertoldi. ¿Cómo surgieron esas colaboraciones y por qué decidieron incluir esas voces externas a la banda?
En realidad siempre tuvimos colaboraciones, pero siempre le esquivamos a la utilización del invitado. Siempre vino gente que estaba conectada con Vetamadre por algún lazo. Como cuando vinieron Arnedo y Mollo, no aparecen en los cortes del disco. Siempre fueron apareciendo amigos de la ruta del rock. Es lo que pasó con Corvata. «Coca» Monte habÃa grabado una vez un tema a dos bajos con Arnedo y entonces dijo, «¿No podré grabar uno a tres bajos?». Asà fue como invitamos a grabar a Brenda Martin (Eruca Sativa) y a «Corvata» (ex-Carajo). Pero esa vez él sólo vino a grabar el bajo y me ayudó a revisar la letra. Yo ahà dije, «este es un ser de luz«, porque es maravilloso.
¿Cómo lo convencieron finalmente de que cante?
Un dÃa vino «Coca» y me dijo ‘Corvata me preguntó qué cuando venÃa a cantar ¿Qué tema va a cantar?’ No tenÃamos un tema que encajara bien y no sabÃamos cuál decirle. Hasta que el último dÃa de grabación, yo tenÃa un riff del que armamos un tema y dijimos este es el tema para que lo cante. Vino escuchándolo mientras venÃa al estudio y cuando llegó nos sugirió meterle algunas cosita y quedó.
¿Y con Marilina?
A Marilina la fui a ver una vez a un show suyo y cuando fui a saludarla al final del recital, le di un abrazo y le propuse grabar algo algún dÃa y ella me dijo que sÃ, de una. Entonces como estábamos trabajando con Gabi Pedernera (baterista de Eruca Sativa) en la producción, le dije de invitarla y él me sugirió que la dejemos a ella elegir el tema que quiera grabar. Asà fue como ella vino, escuchó todas las canciones, eligió ‘Veta Madre’ y la verdad es que no podrÃa haber sido mejor.