Dozer es el actual campeón argentino de Batalla de los Gallos. Consiguió el puesto número uno este año después de haber sido semifinalista en 2016 y 2017. El campeonato le dio el pase a la próxima Final Internacional y será, junto a Wos, uno de los dos participantes argentinos que lucharán para que el tÃtulo se quede en Buenos Aires. Cada vez que a Dozer le formulo la pregunta, él me mira atento, piensa dos segundos y responde de forma sincera y autorreflexiva. Escucha e invita a escuchar.
¿Qué cambió en tu vida ser campeón argentino?
No volvà a pisar más un subte. Yo vivÃa laburando en el subte. Laburaba y laburaba, siete horas rapeando de vagón en vagón. Después de la Red Bull no volvà más. Y ahora no lo hago no porque diga «ah soy famoso», sino por la cantidad de viajes que tengo. Estuve viajando por todo el paÃs, por la Patagonia, por el norte, por Chaco, por Córdoba, por Entre RÃos, una locura. Por todos lados, se me olvidan algunos lugares.
Y en tu cabeza, ¿cambió algo?
Algo que me pasó a mà es que yo no sabÃa que tenÃa el valor para poder llegar a un nivel como para ganar algo. Nunca habÃa ganado, siempre estaba en un nivel regular. Yo veÃa eso nomás, que perdÃa. Y eso hace que uno se subestime, se menosprecie. A veces la presión de la gente y el hecho de que no les guste lo que hacés también te hace menospreciarte. No sabÃa el valor que tenÃa hasta después de salir campeón. Después de eso toda la gente empieza a verte más, tenés más difusión y te valoran. Ahà dije: «es verdad, no sabÃa que tenÃa esto». El bajón es que uno se empieza a dar valor recién cuando otros lo hacen. Pero uno a veces no se lo cree hasta que pasan cosas asÃ.
A la hora de batallar no recurrÃs al insulto, ¿cómo trabajás ese estilo?
Es algo mÃo, no lo trabajo. Es como de repente no querer a tu vieja, vos sabés que te podés pelear pero uno la ama a la vieja porque es parte de uno. Yo ya me crié de esa forma, soy una persona que antes de insultar prefiere adquirir otras palabras, otras maneras de expresarse. El insulto no forma parte de mÃ, por más que muchos lo hagan. Yo me mato de la risa porque me causan gracia, pero no creo que se necesite eso para ganar. Y sé que esto también es inspiración para otras personas que eligen lo mismo que yo. Antes me decÃan «pero vos perdés, imaginate cómo me va a ir a mû, y yo no los podÃa convencer desde el lado de un perdedor. Salà campeón y ahora puedo hablarle a esa persona y decirle «mirá chabón, yo no insulté y pude ganar».
Lo más complicado quizás es defender la forma en la que soy. Porque uno puede defenderse desde una vida loca «yo vivo de rockstar» y demás, pero desde el lado que me atacan a mà es complicado. (Ndr: muchos de los contrincantes basan sus ataques en la forma de vida cristiana de Dozer)
¿De dónde sacás herramientas para adquirir nuevas palabras y relaciones?
A las palabras las escribo. Veo algo como, no sé, ático y la anoto. Después, a la hora de rapear ya las tengo en la mente.
¿Qué consejos le das a quienes recién empiezan en el freestyle? Ahora desde tu lado ganador.
Que si les gusta esto que se metan, que no tengan vergüenza. Que lo hagan y lo amen. A mà me encanta. Uno a veces espera el reconocimiento o a ver qué van a decir en contra tuyo y eso te impide avanzar. La verdad es que es algo re lindo, a una persona como yo que fui muy tÃmida y acomplejada por mi apariencia toda mi vida de repente el freestyle me hace expresarme como nadie. Al que me escucha le digo eso: si te gusta esta música agarrala como un tesoro, cuidala y sobre todo disfrutala. Porque lo que va a hacer que permanezcas en la música es la pasión. Se nota cuando eso se pierde. Yo estoy rapeando desde los 15 años y recién ahora salà campeón pero porque nunca perdà esa pasión.
¿Qué esperás para esta gran Final?
Que sea lo que Dios quiera. Yo sé que puede haber muchas sorpresas, puede ganar uno, puede ganar otro. Yo espero de mÃ, lo que practico, cómo me mentalizo. Quiero estar al nivel de lo que estoy preparando para darle a la gente. Estoy preparando una versión mÃa diferente.
Ansiedad por lo que sucederá este domingo en el Club HÃpico en la Ciudad de Buenos Aires y por la nueva versión que Dozer nos tiene preparada.