Cualquier banda puede transformarse de un dÃa para el otro en algo completamente diferente a lo que era. Esa parece que fue la premisa que Matt Mondanile tuvo de cara a este tercer disco de su proyecto solista Ducktails. Es que el guitarrista de Real Estate abandonó las grabaciones lo-fi en el sótano de su casa y armó banda de lujo con varios amigotes suyos para meterse en un estudio y grabar este sorprendente e inesperado disco.
Para contextualizar un poco, es importante aclarar en estas primeras lÃneas que estamos, tal vez, frente el guitarrista más interesante que apareció en los últimos cinco años. Creador de un estilo propio, Mondanile es todo un artesano de las melodÃas y los sonidos flotantes. Y esa cualidad ya queda el descubierto en Ivy Covered House, opening track que arranca con unas lÃneas de guitarra que respetan su fórmula mágica: simpleza, buen gusto y efectos de reverb, delay y phaser en su justa medida.
De todas maneras, lo que hace de este un trabajo distinto no son justamente las guitarras. La banda que armó -que incluye a Martin Courtney (cantante de Real Estate), Francis Lopatin (Ford & Lopatin y Oneohtrix Point Never), Joel Ford (Ford & Lopatin y Airbird), y sus amigos de Big Troubles (banda que giró varios meses con Real Estate)- desarma completamente lo que conocÃamos hasta este momento como el universo Ducktails. Todas las canciones del disco están cargadas de sintetizadores, bajos bien al frente, baterÃas reales y melodÃas que remiten bastante a los 80s.
Si bien el trabajo es bastante parejo, se destacan canciones como Under Cover, que tiene una cadencia perfecta y un interludio con vientos a la Destroyer; Sedan Magic, con Madeline Follin de Cults en la voz; y Letter of Intent, donde el bajo super groovero de Ford y la delicada voz de Jessa Farkas, que parece estar recostada sobre algodones, se roban el protagonismo de lo que seguramente sea una de las canciones más destacadas de todo el año.
Ya sobre el final, y casi a modo de outtake, Mondanile sorprende con la inclusión de Academy Avenue, una canción que retoma el sonido que Ducktails solÃa tener antes de grabar este disco. Una especie de regalo, como para no extrañar tanto al pasado y demostrar que la esencia no cambia nunca. Está claro que las cosas se transforman y mutan todo el tiempo, y está muy bien que asà sea.
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DEGUSTACIÓN
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