Tame Impala – Lonerism

noviembre 1, 2012

Tame Impala

Lonerism

2012 – Modular Recordings

[8.5]

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Luego de su paso por Buenos Aires, los comandados por Kevin Parker presentaron Lonerism, su segundo LP. Vale destacar que a pesar de girar con  Nick Allbrook, Julien Barbagallo y Dominic Simper como banda estable, ninguno de ellos tuvo participación en este material. El propio Kevin se encargó hasta de la foto de la portada. La excepción es que una vez más recurrió al notable Dave Fridmann (Mercury Rev, Flaming Lips) para la mezcla «“ aunque tampoco participó en la grabación.

En cuanto al sonido de Lonerism, Ian Cohen de Pitchfork señaló que «Parker no suena como un productor de electrónica, el simplemente piensa como uno«. Y entiendo que es muy acertada la apreciación en tanto que la música electrónica y la música de Tame Impala están muy pendientes de la textura, la armonía y el ritmo. También se animan a cambiar la figura protagónica del cantante (como lo señalamos cuando tocaron en Niceto Club). Apocalypse Dream  es una clara muestra de ello. La voz de Kevin se pierde entre los coros y la reverberación de los teclados que se suman progresivamente hasta estallar y derivar en una especie de estribillo sobresaliente, acentuado por una línea de bajo que lo persigue apenas por detrás.

Las bases grooveras también son otro elemento característico de la electrónica, y Parker sabe utilizarlas con audacia. Elephant es una oda al rock psicodélico de fines de los 60’s con un bajo distorsionado bien grave, sintetizadores saturando la escena y una pizca de modernismo que la hace sonar completamente novedosa.

The Beatles es otra influencia palpable de Tame Impala y la evidencia más clara es Mind Mischief. En esta canción mezcla la psicodelia lennoniana de Revolver y Sgt. Pepper con la crudeza de la Rickenbaker de sus discos en solitario. También el ensamble vocal y la base de batería melódica pretenden emular a la mística banda de Liverpool ¿Pero quién puede juzgarlo por eso?

Además, tanto el comienzo como el cierre del disco son notables. Pareciera estar representada la bipolaridad del ácido que llega como una locomotora y cuando se va te deja flotando como una balsa a la deriva. «Debo estar por encima de ello. No debo dejar que me derriben«, afirma en Be Above It, mientras una base machacante repite el titulo de la canción con funciones rítmicas y alrededor todo parece tornarse confuso y estridente. Una declaración de principios, seguramente, ante lo que pueda llegar a decirse de cualquiera que apueste al individualismo creativo.

Por su parte, Sun’s Coming Up es un valsecito que empieza con piano de Jay Watson (el único colaborador del álbum) y la voz de Parker despidiéndose para siempre de esa chica y de todas esas cosas que pensó que nunca terminarían: «Oh my darling, why won’t you answer? Seven AM, midnight is over / Sun’s coming up now, I guess it’s over«. Y de pronto cae sobre un puente colgante de guitarra que se balancea de derecha a izquierda y se va perdiendo entre las ondulaciones calmas del wah-wah y el oleaje del mar.  Y así se va… como son arrastradas las arenas de la playa hasta el fondo del océano.

DEGUSTACIÓN

ELEPHANT