«I can hear everything, it’s everything time«
¡Que comienzo más apropiado! Es que ese anónimo señor que nos anuncia, en el comienzo mismo del quinto disco de Gang Gang Dance, «puedo oÃr de todo, es tiempo para todo« nos sintetiza en pocas palabras los excitantes cuarenta y siete minutos que siguen: un dionisÃaco viaje sonoro como no se ha escuchado en mucho tiempo.
Luego de un tÃmido acercamiento a las estructuras más convencionales del formato canción, en el también recomendadÃsimo Saint Dymphna (2008), el quinteto de Manhattan vuelve a alejarse años luz de lo que podrÃa ser un hit radiable al combinar no wave, prog rock, psicodelia, glitch, world music, minimal techno, voces orientales, percusiones tribales, efectos de rave, sintetizadores luminosos y atmósferas new age.
¡Pero a no temer! No estamos frente a otro Frankenstein musical snob que repasa los «deber ser» del rock. A diferencia de tanta banda atrapada en la seguridad de la moda retro, y valiéndose del ritmo (no como una cosa que está en el fondo detrás de la voz sino encarado desde una óptica tribal y casi ritual), prescindiendo de la rigidez guitarrera del rock blanco (trabajando con los planos y las profundidades) y usando la particular voz de Lizzi Bougalsos (mezcla de Liz Fraser exaltada, Fever Ray tailandesa y estrella de Bollywood) como encantadora de serpientes Gang Gang Dance logra darle sentido propio a su música y crear su disco más homogéneo.
Eye Contact pertenece a esa extraña y cada vez más infrecuente clase de discos que nos demandan una escucha atenta pero, una vez que nos sumergirnos bien profundo en su materialidad sonora, nos premian. En este caso con una exuberante, atrapante e iridiscente sucesión de sonidos, texturas y paisajes que fluyen y se funden entre sà para dar forma a un disco que es, a la vez, atemporal y futurista. Si cerramos los ojos mientras lo escuchamos, ¡podemos imaginarnos una fiesta dentro de cien años en una estación espacial o una fiesta ritual en la Atlántida! Es música que produce algo que ya parecÃa perdido: desata la imaginación.
«I can hear everything, it’s everything time«
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DEGUSTACIÓN
GLASS JAR
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