Jeremy Jay – Splash

El joven y talentoso cantautor norteamericano se despacha esta vez con nueve canciones apasionadas y sensibles. Siempre inspirado en el pop de sintetizadores, Jeremy Jay rompe el molde y demuestra que se puede ser romántico sin ser cursi, como ya lo había insinuado en sus dos trabajos previos, A Place Where We Could Go (2008) y Slow Dance (2009).

Con este tercer trabajo, ya no quedan dudas de las condiciones y habilidades precoses de Jay, ya que suena como un verdadero trovador. También es destacable su coherencia y simpleza narrativa. Splash muestra un sonido parejo y brillante que por momentos actualiza melodías de dos o tres décadas atrás, como en el caso de Someday Somewhere.

El álbum abre con As You Look Over The City, en la cual J.J. nos relata su reciente mudanza a Londres, pero principalmente muestra un particular manejo de la voz que se acerca a Stephen Malkmus. Lo mismo sucede en It Happened Before Our Time, con una entrega vocal admirable que cambia de tono constantemente. En Just Dial My Number, con inocencia adolescente espera junto al teléfono. Aquí es donde roza el ridículo, pero sabe escaparle a tiempo. Por otro lado, A Sliver of Chance, una pieza pop melódica e introspectiva, es claramente lo mejor del álbum.

Una de las mejores cosas de Jeremy es que su sonido familiar, con reminiscencias a Bowie y Morrissey, siempre tiene un sabor completamente propio, estando siempre muy lejos de perder identidad. Otro disco, titulado Dream Diary, se espera para finales de este año. Serán trece canciones y sólo podemos esperar que tengan el mismo fuste y sean tan agradables como las de Splash.

Degustación:

A Silver of Chance

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